En los diez últimos años, los procesos de articulación o de convergencia entre militantes, movimientos sociales, organizaciones poblacionales o de vecinos, así como instancias de apoyo técnico que defienden el derecho al hábitat se han consolidado. Nos reunimos en torno a las luchas por la realización de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC) fundamentales para la defensa del lugar estructural de la familia, de las comunidades rurales y urbanas,  y de la convivencia basada en la inclusión de todas y todos.  Nos referimos pues a los DESC relacionados al derecho al hábitat. Estos derechos corresponden a obligaciones de los estados con relación a la vivienda, al agua y al saneamiento, a la educación, a la salud y a la participación; son las bases jurídicas para exigir los derechos colecti vos a la tierra, a los recursos naturales, a los medios de subsistencia, a la energía, al transporte y a la recreación, de forma muy especial al derecho a la ciudad, a la soberanía alimentaria y a la justicia climática. Por su arraigo en la familia, la casa, el barrio o el pueblo y en el espacio público, las mujeres son las principales protagonistas de las luchas locales por la defensa del derecho al hábitat. Sin embargo, a la par de ellas, los niños y niñas, las personas minusválidas, desalojadas, sin techo, nómadas y refugiadas son las principales excluidas de los derechos y por lo tanto debemos reconocer y defender sus derechos en todas nuestras luchas.
Los obstáculos a la realización del derecho al hábitat se multiplican en el mundo entero, sin relación con las diferencias culturales locales. Por lo tanto , es nuestro deber  denunciar las presiones inmobiliarias y del valor del suelo sobre los sectores más pobres, desposeídos y vulnerables ; el acaparamiento de las tierras; la destrucción de los barrios populares y de los pueblos rurales; la gentrificación de los barrios antiguos; el alza de los alquileres  comparada con el estancamiento de los ingresos; los megaproyectos y mega eventos cuya planificación y desarrollo violan el derecho de las comunidades a permanecer en sus lugares de residencia tradicionales; los conflictos armados y las ocupaciones de territorio; los desastres llamados ‘naturales’ y los efectos del cambio climático traducidos en inundaciones, desprendimientos de tierra  y la contaminac ión del agua, del aire y del suelo ; y por todos estos temas debemos denunciar las desigualdades y la discriminación de las mujeres en la realización de sus derechos al hábitat. Todos estos fenómenos territoriales generan múltiples desalojos forzados, que afectan con mayor frecuencia muchas comunidades rurales y urbanas en todo el mundo. 
Proposiciones: Las organizaciones locales, nacionales, regionales, continentales y globales reunidas aquí reunidas en el proceso de construcción de la Asamblea Mundial de los Habitantes, nos comprometemos a seguir, unidas, la construcción de la solidaridad para que todas y todos tengamos derecho a vivir en paz y dignidad en el campo y la ciudad.
Asimismo, nos comprometemos a participar cada año en la Campaña Mundial por el Derecho al Hábitat que se celebra el primer lunes de octubre.
El 3 de octubre del 2011 y el 1ro de octubre del 2012, los temas que nos agruparán en el mundo son: (i) las causas y los efectos de los desalojos forzados, los sufrimientos y el empobrecimiento de las personas afectadas por los problemas del hábitat rural y urbano; (ii) la solidaridad con las y los militantes por el derecho al hábitat victimas de la represión y de la violencia en contra de sus derechos cívicos e políticos.
La campaña anual por el derecho al hábitat se manifestará de forma inclusiva, en la diversidad, y será coordinada  por todas las personas implicadas en dicha lucha, en el mundo entero;  por medio, entre otros, de denuncias, protestas, ocupaciones, manifestaciones,  debates públicos y reuniones. La difusión de la campaña se realizará principalmente por las redes sociales en el internet; también será informada a través de los sitios de los movimientos, redes y organizaciones sociales comprometidas.
Para implementar este compromiso, se organizará un grupo de trabajo con representantes de las principales redes y organizaciones de esta convergencia. En un plazo no mayor de dos semanas, este comité deberá recoger los resultados del trabajo realizado durante el FSM 2011 en los barrios populares y en el campus universitario.

En Dakar, el 10 de febrero de 2011, suscriben a este compromiso:
ABONG, Asociación brasileña de ONG
ACIDAK  Asociación Comité de Asentamientos Precarios, (Dakar, Senegal)
AHTB, Associación de Habitantes y Trabajadores de Baraka (Dakar, Senegal)
AIH, Alianza Internacional de Habitantes
AITEC, Asociación Internacional de Técnicos e Investigadores (Francia)
ALOP, Asociación Latinoamericana de Organizaciones de Promoción
CERPAC, Centro de investigaciones populares para la acción ciudadana (Senegal)
Comité de Gestion des Inondations et de Déguerpissement de Médina Goumars (Guédiawaye, Sénégal)
DAL, Derecho a la Vivienda (Francia)
EMAD, Entente des Mouvements et Associations de Développement (Dakar, Senegal)
ENDA-Economie Populaire (Senegal)
ENDA-Rup, (Senegal)
FAL, Frente de Autoridades Locales
HIC, Coalición Internacional del Hábitat
Intermondes (Senegal)
LOCOA – Líderes y Promotores de Organizaciones Comunitarias en Asia
Mouvement And Soukali Médina Goumars (Dakar, Senegal)
No-Vox
Plateforme DESC Sénégal – RADI